El anuncio del ministro de Economía, Luis Caputo, sobre el cierre de sucursales del Banco Nación en municipios que aumenten las tasas municipales refleja una estrategia del gobierno nacional para presionar a los gobiernos locales que elevan impuestos. Según Caputo, esta medida responde a un pedido del presidente Javier Milei, quien ha enfatizado la necesidad de reducir lo que considera abusos fiscales y proteger a los ciudadanos de lo que ve como cargas tributarias excesivas e injustificadas.
El cierre de sucursales en La Pampa, a raíz del aumento del impuesto a los Ingresos Brutos por parte del gobernador Sergio Ziliotto, parece ser un ejemplo concreto de la aplicación de esta política. Este tipo de acción también subraya una tensión entre el gobierno nacional y algunas administraciones provinciales y municipales, que buscan mantener o aumentar ingresos locales a través de impuestos.
Caputo, además, presentó esta medida como parte del esfuerzo del gobierno por impulsar un cambio en el país, y en sus declaraciones hace hincapié en la visión de que parte de la clase política se resiste a abandonar un modelo de gestión que favorece a ciertos sectores, mientras la mayoría sigue enfrentando dificultades económicas.