La venta ilegal de terrenos dentro de territorios indígenas relevados por el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) está generando un grave conflicto en Fortín Dragones, Embarcación, Salta. El caso más destacado involucra a Mario Campos, quien compró un lote en territorio ancestral de la comunidad wichí de Misión Algarrobito y se enfrenta a su cacique, Jorge Vázquez. Vázquez denunció amenazas de Campos luego de que la comunidad removiera los postes colocados por el comprador en el terreno en disputa.
Un juez de Garantías de Tartagal dictó una medida cautelar de prohibición de acercamiento y violencia contra Vázquez, pero según Teodoro Paz, referente wichí de Las Llanas, la medida no se cumple, y Campos mantiene una carpa en el terreno. La investigación revela que la venta se realizó a través de la Comunidad Asamblea de Dios, que también ocupa tierras en la zona. Paz denunció que esta práctica, donde se intercambian lotes por vehículos usados, electrodomésticos o incluso celulares, se está extendiendo a otras comunidades, generando un riesgo de conflictos interétnicos.
El subsecretario de Regularización Territorial y Registro de las Comunidades Indígenas de la provincia, Ariel Sánchez, explicó que el relevamiento realizado bajo la Ley 26.160 (derogada) presenta superposiciones territoriales entre comunidades en la región de Dragones. Esto genera confusión y la posibilidad de acuerdos con criollos en tierras con límites inciertos. Sánchez mencionó la existencia de un titular registral con 14.000 hectáreas que albergan a varias comunidades con superposiciones territoriales, situación que se busca regularizar. La falta de acceso a los datos completos del relevamiento dificulta la resolución del conflicto. El INAI realizó el relevamiento de manera centralizada, sin la debida delegación a la provincia, lo cual contribuyó a las superposiciones. El gobierno provincial está acompañando a las comunidades afectadas y buscando soluciones para regularizar la situación.