La caída en el consumo de yerba mate en Argentina refleja el impacto de la reducción en el poder adquisitivo, una tendencia que afecta especialmente productos de consumo masivo. Este descenso del 8,8% representa una reducción significativa, pasando de 212 mil toneladas en 2023 a 193,4 mil toneladas en 2024.
Además, la comparación con el pico de consumo de 2021, cuando la yerba mate experimentó un auge en la demanda, subraya cómo la situación económica actual afecta incluso a productos tradicionales. La yerba mate, un símbolo cultural importante y de consumo diario en Argentina, está mostrando así un cambio en los hábitos de consumo debido a la inflación y a la pérdida de capacidad de compra.