El reciente abrazo al Hospital Bonaparte, encabezado por la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) junto a diversas organizaciones sindicales, sociales y políticas, refleja una lucha urgente y profundamente significativa en defensa de la Salud Pública y los derechos laborales. Bajo consignas como «Vaciar es cerrar» y «Sin trabajadores no hay Salud Mental», el acto tuvo como objetivo demandar la reincorporación de trabajadores despedidos y denunciar las políticas gubernamentales que están debilitando el sistema sanitario público.
Mercedes Cabezas, Secretaria Adjunta de ATE Nacional, destacó el rol esencial que los hospitales públicos desempeñaron durante la pandemia, siendo el pilar fundamental para garantizar atención sanitaria tanto a quienes cuentan con obra social como a quienes dependen exclusivamente del sistema público. Sus palabras subrayan la importancia de defender el trabajo estatal y la Salud Pública como un derecho universal, no como un privilegio.
Este tipo de movilizaciones no solo visibilizan el impacto de las decisiones políticas sobre la vida de las personas, sino que también recuerdan que un sistema de salud sólido depende del reconocimiento, respeto y dignidad hacia sus trabajadores.