Las rejas de 150 metros de extensión que rodeaban Plaza de Mayo fueron retiradas en su totalidad un día antes de la asunción de Alberto Fernández.
El enrejado fue colocado durante la presidencia de Mauricio Macri pero el presidente electo quiso realizar el festejo de mañana sin la estructura, para ello se reunió la semana pasada con Horacio Rodríguez Larreta quien aceptó su pedido.
Los encargados del trabajo comenzaron a quitar las vallas el domingo por la noche y finalizaron hoy al mediodía para sorprender a quienes, en su rutina, pasan diariamente por el lugar.
La barrera creada durante el macrismo entre la casa de gobierno y el pueblo ya no está y en su lugar quedó la plaza abierta al público con el escenario listo para el festejo de mañana.